Málaga tiene un Jardín histórico y botánico que reúne en un relativo pequeño espacio variedades que hacen que puedas visitarlo casi cada mes, pero imprescindible durante los cambios de estación.
Este fin de semana era el momento de una visita imprescindible, la de la floración de las Glicinias (Wisterias). Así que con un grupo de amigos de ACUAMáLAGA para allí que nos fuimos. Fue una mañana algo fresca y con un trasiego importante de visitantes que hacían que la concentración no fuera la mejor. Pero me defendí lo mejor que puede realizando algunos bocetos que servirán para futuras acuarelas e incluso realizando «Bautizos de acuarela» con los niños (se me debe notar que me gustan y que soy abuela) que se acercaban y que realizaron su primer acercamiento al papel, a los pinceles y los pigmentos. He de decir que las niñas, como no, son las más atrevidas, Nerea, Alicia, Pedro, Marta, ….. , todos se llevaron su mini-acuarela. Y para una mañana completa, uno de los bocetos que realicé de algunos racimos de flores pintados a la manera japonesa de sumi-e, encontró a su dueño, Juan Antonio, un amante de lo japonés. Espero que la disfrute mucho tiempo.
Arte y Seda 